El café
me arrastra sin querer a un precioso poema.
A nada más aspiro
La vida que murmura. La vida abierta. Gabriel Celaya
La vida sonriente y siempre inquieta.
La vida que huye volviendo la cabeza,
tentadora o quizá, sólo niña traviesa.
La vida sin más. La vida ciega
que quiere ser vivida sin mayores consecuencias,
sin hacer aspavientos, sin históricas histerias,
sin dolores trascendentes ni alegrías triunfales,
ligera, sólo ligera, sencillamente bella
o lo que así solemos llamar en la tierra.
2 comentarios
Luna -
Seguro que llegaré al 2 - 10
(risas)
giovanni -