Blogia
Luna de agosto

La Primavera...

La Primavera...

De qué callada manera
se me adentra
usted

sonriendo


como si fuera
la primavera!
(Yo, muriendo.)



Y de qué modo sutil
me derramó en la camisa
todas las flores de abril.

¿Quién le dijo que yo era
risa siempre, nunca llanto,
como si fuera
la primavera?
(No soy tanto.)

En cambio, ¡qué espiritual
que usted me brinde una rosa
de su rosal principal!

¡De qué callada manera
se me adentra usted sonriendo,
como si fuera
la primavera!
(Yo, muriendo.)

NIcolás Guillén

8 comentarios

Luna -

Muchas gracias caballero del desierto.
Tengo que confesarle que me gusta leerle.
Una grata sorpresa encontrarle por aquí.

Saludos

Anónimo -

No vas a ganar para gomas de borrar.

El lenguaraz -

Oí estos versos cantados por dos de mis amores musicales, me ha encantado encontralos aquí; hablan bien de Ud. madame.

El barquero -

Hace mucho que no leo. Demasiado tiempo, demasiado trabajo, demasiado de todo. Hoy me había propuesto leer de abajo a arriba, pero esta rosa... me ha tocado la fibra.

Luna -

Xing Na...
Ha sido así y será la vida que nos quede...
¿Cree que he olvidado la libretita? pues no, la tengo clavadita.
¿Qué es más, un beso o un abrazo?
El nombre me da risa...

Xing Na -

Compañera,
usted sabe
que puede contar conmigo,
no hasta dos ni hasta diez
sino contar conmigo.

Si algunas veces
advierte
que la miro a los ojos,
y una veta de amor
reconoce en los míos,
no alerte sus fusiles
ni piense que deliro;
a pesar de la veta,
o tal vez porque existe,
usted puede contar
conmigo.

Si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo,
no piense que es flojera
igual puede contar conmigo.

Pero hagamos un trato:
yo quisiera contar con usted,
es tan lindo
saber que usted existe,
uno se siente vivo;
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos,
aunque sea hasta cinco.

No ya para que acuda
presurosa en mi auxilio,
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe que puede
contar conmigo.

Mario Benedetti.

salduba -

Y yo sin rosas.

helio -

Sin palabras. Me quedo sin palabras.