Desde enero...
no había vuelto al pueblo, lo he notado vacío y solitario...sus calles de momento no me gustan, huelen a soledad. No he podido evitar abrir la puerta de tu casa, la del jardín. Allí están todas las plantas deseando salir en esta primavera adelantada.
El acebo está precioso, los tulipanes, azucenas, lirios, juntos con los rosales, claman por ti. Todo el jardín grita tu nombre. Allí, en la ventana al resguardo como siempre, el cassete, con la música andalusí. Llorar no merece la pena, supiste vivir y conseguiste morir como pedías siempre, sin molestar a nadie y sin tener dolor.
Pepín, descansa y no te preocupes, he regado el jardín.
6 comentarios
Luna -
salduba -
Eres buena gente.
Un beso.
Luna -
Ahora que lo pienso....estuve un día de diario, pero ni siquiera pasé por delante de su casa y ayer tuve necesidad de abrir la puerta, mirar el jardín y regarlo, era mi obligación en los últimos tiempos...
Supongo que sus sobrinos venderán la casa, así que he decidido "robarle" algunas plantas el rpóximo fin de semana.
Besos
salduba -
Y con una caja de piedras, ¿enormes?
¡que Dios nos ampare!
Bezitos, muchossssssss
Luna -
Saludos
Álvaro -
Es puro corazón.
Un abrazo