Plaf...

...Más que aprendices de payasos, parecemos contorsionistas.

Y como de costumbre, la que suscribe, tenía algún que otro error de planteamiento, pues no contaba con los ejercicios de calentamiento y hoy tengo agujetas hasta en las cejas a pesar de los masajes con alcohol de romero dados por mi pareji al grito de:

                                                                           ¡¡ payasa verbenera !!

me gustan sus masajes,  tiene manos de seda, aunque siguen en su sitio todas mis agujetas, hoy en vez de masajes, me tomaré un paracetamol y diré que me duele la cabeza... para despistarle y poder llegar al término del curso en medianas condiciones.

La cara de Gabriel da risa, así que tenemos medio camino andado.